Los okupas se han convertido en una pesadilla para muchas comunidades de vecinos, en primer lugar, por el daño que causan a la propiedad privada, luego, por como se ve afectada la convivencia, pues la presencia de okupas en un inmueble provoca conflictos y, lo más grave, incide en el valor de las viviendas.
Empecemos por recordar que las okupaciones obedecen a diferentes razones: ciertamente existen familias que okupan una vivienda por necesidad; gente que alega posturas ideológicas para hacerlo; jóvenes que lo hacen por diversión y; están las mafias de la okupación.
Estas mafias están organizadas, empiezan por sondear qué viviendas están desocupadas y cuáles son las condiciones ante la comunidad de vecinos, si los dueños viven fuera del país, entre otros datos.
Para conseguirlos usan distintas artimañas desde hacerse pasar por visitas hasta preguntar a los mismos vecinos inventando distintas razones.
Estas personas derriban puertas, cambian cerraduras y pueden ir de un edificio a otro, trayendo familiares y amigos para invadir otros pisos desocupados. Botan la basura en cualquier lugar, se roban la luz, el agua; no respetan a los vecinos ni las normas de la comunidad, la lista es larga. Nos referiremos aquí a esos okupas.
¿Qué acciones pueden tomar la comunidad de vecinos?
Lo primero es, confirmar si la ocupación es legal o ilegal, porque se puede tratar de inquilinos con problemas con su contrato o que simplemente dejaron de pagar pero comenzaron a vivir en el inmueble de manera legal; en este caso, pasarían a ser inquiokupas
Lo segundo, es que la comunidad debe notificar al propietario (sea particular o una empresa) si desconocen la situación y apoyarlo en las acciones legales que deba tomar.
De ser confirmada la okupación ilegal y conociendo las bases legales, es decir, lo establecido en el artículo 245 del Código Penal y las distintas leyes aprobadas y modificadas en los últimos años, como por ejemplo, la Ley de vivienda, se debe proceder de la siguiente manera:
Recurrir a la vía judicial, es decir, comunicar el hecho a las distintas autoridades. En este caso, la policía iniciará una investigación con el objetivo de lograr el desalojo conforme a la legislación. En este sentido, es importante que se presenten evidencias como fotografías y testimonios que avalen la denuncia.
Otra opción es atenerse al procedimiento establecido en la LEC (2018), en este caso, se debe presentar una denuncia -debidamente firmada por un abogado y un procurador- ante los tribunales donde se solicita expresamente “la inmediata recuperación de la plena posesión de la vivienda”.
El problema es que las opciones mencionadas suelen convertirse en procesos largos, lentos y costosos para el dueño del inmueble, trayéndole también intranquilidad y mayor preocupación, lo que puede afectar su salud mental.
Ante esta situación, la mejor solución es contratar una empresa como Desocupaciones Mallorca que, de manera rápida y eficaz pueden ayudarle a resolver la calamidad de la okupación pues cuentan con personal capacitado que además conoce la ley, por, tanto pueden brindar el asesoramiento legal recomendable en estos casos.
Medidas a tener en cuenta
Es importante tomar prevenciones para evitar una okupación. Te sugerimos las siguientes:
- Inspecciones constantes a las viviendas que se encuentren desocupadas.
- Colocación de cerraduras de mayor seguridad.
- Instalación de cámaras de seguridad.
- Los propietarios deben mantener sus viviendas en buen estado y mantenerse al día con el pago de los gastos de comunidad, porque una vivienda descuidada o morosa con los pagos a la comunidad puede ser más atractiva para los okupas.
- La comunidad de vecinos debe estar lista para enfrentar con rapidez y eficacia la okupación de una propiedad, respetando siempre la legalidad.
La prevención es fundamental para evitar las okupaciones. Con medidas acertadas, la comunidad de vecinos, de manera organizada y mancomunada podrá velar por su propiedad y garantizar la mejor convivencia entre los vecinos.