Con el transcurrir del tiempo los okupas han ido perfeccionado las artimañas que utilizan para entrar a un edificio, empiezan merodeando el lugar en busca de información, para ello entran a las zonas comunitarias como jardines o los aparcamientos al aire libre.
Estos extraños usan los interfonos para preguntarles a los vecinos si van o vienen, de esta manera estudian sus horarios. Otra de sus artimañas es invadir primero otros espacios en la zona para proceder después a la búsqueda de viviendas para okupar.
En Sant Pere de Ribes (Barcelona)
Los residentes de un bloque de Valles Altos en Sant Pere de Ribes, viven con el temor de que unos okupas que ya fueron desalojados en enero de un piso del que se habían apropiado, vuelvan a entrar en alguna de las otras viviendas.
Su temor se debe, primero, a que los desalojados se han instalado en una caseta cerca de un restaurante de la zona y, segundo, porque han constatado que los okupas se la pasan rondando por las urbanizaciones cercanas a ver en qué vivienda pueden instalarse.
La treta de los interfonos
Los extraños acceden a los espacios comunitarios y se dedican a llamar a todos los interfonos buscando información, inventando cualquier excusa para hacerlo, como que hay un coche con las luces encendidas.
Por supuesto su intención es saber si hay pisos desocupados. Otra de sus trampas es intentar entrar al edificio alegando que van a visitar a alguno de los residentes.
Esta situación mantiene en estado de alerta a los habitantes del lugar, que tienen miedo de ausentarse hasta por un fin de semana, ni que decir de unas vacaciones, por el temor de encontrar su piso okupado al volver.
Los vecinos piden más presencia policial
Los residentes del lugar señalan a los okupas como presuntos autores de la rotura de los cristales de varios coches con la intención de hurtar sus pertenencias. Por otra parte, manifiestan que los okupas han llegado a disparar en las cercanías, y que ellos han puesto al tanto de estos hechos a las autoridades.
Mientras tanto, en Valencia
Un edificio de nueva construcción en Quart Poblet, en Valencia ha sido okupado, dejando a dieciséis familias sin hogar después de haber pagado la reserva. Se trata de un bloque de viviendas ubicado en el número 23 de la calle Desiderio Gallego Moya.
La construcción de este inmueble se inició a principios de los 2000, pero debido a la quiebra de la promotora permaneció abandonado hasta que la Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria, S.A, conocida como Sareb, adquirió la propiedad.
La okupación de las viviendas ocurrió hace más de un mes, mientras la sociedad estaba terminando los trabajos de adecuación para poder comercializarlas; de hecho, para esa fecha, varias familias ya habían pagado unos 7.500 euros como reserva para la adquisición de estas casas.
Por su parte, fuentes de la Sareb aseguraron que ya denunciaron los hechos y remarcaron que están estudiando la situación para poder ofrecer una solución a “los afectados y también a los ocupantes”.
La convivencia en la zona se ha alterado
La relación entre los residentes se ha complicado porque muchos vecinos temen que sus viviendas sean las próximas en ser okupadas; además, les preocupan los grandes altercados generados por los okupas.
Por otra parte, algunos vecinos se quejan por los excesivos controles que lleva a diario la policía para identificar a los okupas; la situación es muy incómoda porque a los residentes les piden el DNI todos los días como si fuesen ellos los invasores.
En otras regiones: Okupas “jardineros” y comerciantes se unen
En Talavera de la Reina y Velada, la Policía Nacional arrestó a cuatro hombres y a una mujer por tráfico de drogas. La investigación comenzó a raíz de unos anónimos con información sobre una vivienda donde estarían cultivando marihuana.
En una primera fase del operativo policial fueron arrestados un hombre y una mujer, ocupantes ilegales desde octubre de una vivienda en Velada, quienes se dedicaban al mantenimiento de un cultivo ilegal de marihuana.
También fue aprehendido un asiduo visitante del lugar, quien fue identificado como uno de los tres socios de un negocio en Talavera de la Reina que se dedicaba a la venta de productos derivados de la marihuana.
En la segunda fase fueron arrestados los otros dos administradores del negocio como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas.
Los cinco implicados se dedicaban a esta actividad delictiva de manera profesional, siendo ésta su principal fuente de ingresos. En el procedimiento fueron incautadas más de 1.700 plantas de marihuana.
En el negocio de Talavera de la Reina fue requisado medio kilo de marihuana. Sin embargo, las autoridades no han informado cuál de los cuatro locales dedicados a comerciar el cannabis en el lugar es el implicado en esta operación.
Son muchos los trucos y artimañas que utilizan los okupas hoy día para invadir una propiedad, muchos con intenciones delictivas más allá de habitar una propiedad privada.
Por ello es importante informarse y contactar con profesionales en okupas como Desocupaciones Mallorca, que cuentan con especialistas al tanto no solo de los vacíos legales existentes sino de los trucos y artimañas okupas recurrentes.