Desocupaciones Mallorca

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El reclamo de deudas a inquilinos es una situación que a menudo puede tornarse conflictiva, si hay muchos meses de retraso, si se requiere el desalojo de inquilinos por impagos de alquileres.

Cada situación es distinta y los pasos varían de acuerdo a la particularidad tanto del arrendador como del inquilino.

Además del lugar donde se realice la demanda, ya que hay leyes que pueden variar según la comunidad autónoma como podrían ser las Islas Baleares.

Se puede realizar un reclamo por impagos de alquiler y solicitar el desahucio del inquilino por esta misma razón.

También es factible realizar un reclamo por impagos del alquiler si el inquilino ha abandonado la propiedad y dejó una deuda pendiente.

Otro caso sería solicitar un desahucio sin reclamar la deuda de alquiler acumulada.

Cada opción será relevante a la situación en que esté el propietario y si es de su mayor interés desalojar la propiedad o recuperar la deuda.

Al solicitar el desahucio y el reclamo por impagos, se realiza más presión por parte del inquilino ya que sería de su interés el que no lo desalojen y por lo tanto estaría más inclinado a pagar la deuda de alquiler.

Ya en el caso de solo reclamar las deudas y el inquilino continúe sin pagar, 

se deberá realizar otra demanda meses después para solicitar un desahucio.

Y en caso de que el inquilino ya se haya mudado de la residencia, puedes demandar por impagos de rentas y suministros.

En cualquier caso existen dos opciones, un juicio verbal o un proceso monitorio, la diferencia de cada es si se tiene conocimiento de cuál es la nueva residencia del inquilino (en caso de que se haya mudado).

¿Cómo funciona el reclamo de deudas e impagos?

En España, el cobro de deudas e impagos de alquileres sigue un proceso legal establecido. 

En juicio verbal

Se necesitará la presencia de un abogado y un procurador para la demanda, así como una solicitud para averiguar cuál es el nuevo domicilio del inquilino.

Existen 10 días de plazo para que el inquilino se oponga a la demanda, en caso de celebrarse un juicio el juez dictará la sentencia.

Cuando la sentencia ha sido notificada y el inquilino continúa sin pagar los impagos, el propietario debe interponer una nueva demanda si quiere tener la opción de poder embargarlo.

En todo caso, es de suma importancia señalar que antes de iniciar el proceso de cobro de deudas, el propietario debe asegurarse de que todo el proceso esté realizado de manera legal.

Además de asesorarse con fuentes confiables como abogados o empresas de desalojo que ayuden a realizar este tipo de procesos de la manera más clara y factible posible para el propietario o arrendador. 

En un proceso monitoreo

El propietario debe enviar una notificación de pago al inquilino, estableciendo un plazo para que este pague sus deudas. 

La notificación es un burofax y se enviará siempre y cuando se conozca la nueva dirección de domicilio del inquilino.

Si el inquilino no paga, el propietario puede presentar una denuncia ante los tribunales.

Una vez presentada la demanda, el tribunal convocará a ambas partes a una audiencia en la que se intentará llegar a un acuerdo. 

Si no es posible llegar a un acuerdo, el tribunal emitirá un fallo definitivo que se puede ejecutar mediante un procedimiento de embargo, en el que las autoridades pueden embargar los bienes del inquilino, incluyendo su salario.

Si el inquilino se opone a la demanda, se cancela el proceso de monitoreo y se debe realizar un juicio verbal, a menos que el propietario se oponga a la acción tomada por el inquilino. 

En el caso de las demandas por reclamos de impagos en un proceso monitoreo no es necesaria la presencia de un abogado y procurador.

Sin embargo, es importante señalar que las leyes de cobro de deudas pueden variar según la comunidad autónoma española.

Es decir, es posible que las leyes no apliquen de igual manera en la capital del país como en las islas de Mallorca o Menorca.

En definitiva el cobro de deudas e impago de rentas son procesos que en ocasiones pueden ser tardados, tanto al esperar que tu caso sea procesado, que el demandado sea notificado, y los distintos tiempos que lleva cada proceso de una demanda.

Sin contar los casos donde la resolución no es la esperada por el demandante y requiere entonces comenzar con nuevo proceso judicial para obtener el pago de la deuda del inquilino o su desalojo.